Una opinión sobre 40k en 2019 y los Primarcas

Este martes día de Año Nuevo pudimos ver publicado en Warhammer Community un artículo sobre las novedades que nos esperan este año en 40k. Concretamente son estas:

Blackstone Fortress: 2019 verá nuevos minis para este juego de misiones oscuras y nuevas expansiones. Si pensabas que los Men of Iron han sido geniales, aún no has visto nada...

Los Culto Genestealers han estado esperando su momento para atacar, y en 2019 la segunda oleada de estos insidiosos infiltradores aterrizará junto a su nuevo Códex.

Kill Team seguirá creciendo en 2019, con nuevas expansiones que te ofrecerán nuevas formas de jugar y te permitirán usar aún más unidades y facciones en el juego.

Vigilus Defiant: El escenario está listo para el segundo capítulo épico de este conflicto masivo. Con la Legión Negra a punto de llegar a este asediado mundo centinela, el 41.º Milenio podría verse sacudido por todavía más sucesos importantes...

Finalmente, 2019 es el año en que ocurre. las Sisters of Battle de plástico llegarán por fin, y si eres un nuevo jugador o has estado esperando décadas para que esto suceda, te va a sorprender...

De forma general ya habían anunciado o bien confirmado que seguirían dando apoyo y lanzando nuevo material para sendos universos de Warhammer. Sin embargo al leer el artículo en cuestión han surgido algunas dudas, centradas más en lo que no comentan que sobre lo que ya esperamos. Estas son las incógnitas que nos quitan el vespertino sueño:

Conflicto en Vigilus: La proclama de Haarkon El Reclamador nos emplaza al martes 5 de marzo, cuando se cumplan ochenta días de su promesa en hacer sucumbir este mundo bajo la acometida de su lanza Helspear. Abaddon es casi seguro que volverá, de hecho es necesario que vuelva, con un reesculpido a la altura de su importancia en el trasfondo. Y a partir de aquí aventuramos* lo siguiente:

Tras la aparición de Magnus, Guilliman y Mortarion, tendremos una "época" de NO aparición de Primarcas en el 41º milenio.

¿Por qué?

El hecho que reaparezcan personajes con nombre propio que no son Primarcas requiere espaciar los lanzamientos** y que el devenir de la historia de 40k relate los hechos relacionados con la vuelta de estos personajes no Primarcas.

Más razones

Tras el ejemplo de Marneus, se dará una primarización del Alto Rango y Comandancia de Capítulos de Marines Leales. ¿Os habéis fijado que (casi) TODOS los Comandantes de los principales Capítulos están todavía en resina o incluso metal? Azrael, Dante, el Gran Maestre Helbrecht, Vulkan He'stan, Lysander, Pedro Kantor, Kor'sarro Khan y Kayvaan Shrike. Solo se salva Logan Grimnar, cuya mini se renovó y desde entonces lo acompaña su carro gravítico tirado por lobos fenrisianos. 

Y es que aquí nos topamos con un aspecto importante de la estrategia de Games Workshop y Citadel Miniatures en renovar todo su catálogo y pasarlo a plástico: no pasan desapercibidas las campañas Hecho Bajo Pedido (Made to Order), la retirada de producción de muchos kits en resina (tropas Elysianas y otros) y la vuelta de facciones que antes estaban en metal u otro material que no fuera plástico, básicamente los cuatro Poderes del Caos (empezando por los Demonios), los recientes Goblins Grots de Age of Sigmar y las propias Adepta Sororitas, de las que hablamos abajo. 

Si pudiésemos trazar un paralelismo entre Malign Portents y la campaña de Vigilus, tendríamos varias coincidencias que podría ponernos sobre la pista de como se está desarrollando esta campaña: un libro con bastante contenido, lanzamiento de unas pocas minis y una implicación en el trasfondo destacable. Sí que hay una diferencia importante: Vigilus tendrá una segunda parte, que se traducirá tal y como esperamos en la llegada de el Señor de la Legión Negra. 

Así, Abaddon y Marneus son la causa de, quizá, un 2019 sin Primarcas en 40k. Pero hay algunos argumentos más para apoyar esta hipótesis.

· La vuelta de las Hermanas de Batalla: tras veinte años sin estas guerreras hablamos de un evento tan o más importante como la vuelta de un Primarca. Un lanzamiento así merece toda la atención del estudio de diseño, modelado de minis, redacción de novelas y trasfondo, etc. es decir, poner toda la maquinaria de GW a trabajar. Su vuelta puede ocupar perfectamente una ventana de lanzamientos de dos o más semanas, por no decir todo un mes.  

· Rogue Traders y Fortalezas Negras: Tanto Elucia Vhane como Janus Draik y tooooodas las minis que acompañan a estos dos personajes, buenos y malos, pueden tener una representación destacada no solo por sus respectivos juegos y futuras expansiones para Kill Team y Blackstone Fortress, sino porque también puede haber un porte de algunas de estas minis al juego principal de 40k, ya sea con algunas cajas individuales como podrían ser los Voidmen de Nitsch o la Guardia Imperial Traidora, que dicho sea, ha sido una de las sorpresas de 2018. Es posible que veamos un Warhammer 40,000 con mucha tropa de base, mucha apertura de facciones o subfacciones, más que la vuelta de súper personajes a la altura de los Primarcas que esperamos con tanta ansia. Tranquilidad y a saborear el viaje, que va a ser largo.  

· Influencia de Age of Sigmar: Slaanesh sigue sin aparecer del todo, pese a la salida de Wrath & Rapture. No tenemos nuevo Guardián de Secretos. Sin embargo una eventual segunda ola de lanzamientos para el Príncipe Oscuro puede tener un efecto en 40k, ya que los Demonios sirven para jugar en ambos universos. Si puede ocurrir algo semejante al lanzamiento más o menos consecutivo (unos después de otros) con los Demonios de Nurgle, la Guardia de la Muerte y Mortarion, bien podría repetirse la historia y dejarnos a un flamante y serpentino Fulgrim en bandeja de plata. Si no ocurre quizá desaparece la única oportunidad de ver Primarcas en 40k este año. Esperamos que no sea así por supuesto.

· La Herejía de Horus es a la vez una ayuda y un impedimento por igual porque tal y como pinta el cierre de la serie con la 54º novela en febrero y el inicio a El Asedio de Terra, quedan muy pocos cabos por atar en cuanto a minis: Sanguinius es una pieza clave, por lo que podría anunciarse a principios de febrero  probablemente acompañando al lanzamiento del Libro VIII de la Herejía, Malevolence, y lo mismo con Lion El'Jonson cuando le toque su turno y deba enfrentarse a su aciago destino. El dramático desenlace de la saga no podría terminar de otra forma que con una posible mini de El Emperador, cerrando así el círculo que empezó Forge World con Horus Lupercal. De este modo, tal y como lo entendemos, no saldrán más Primarcas para 40k sin que antes aparezcan en La Herejía de Horus. 

Solo nos queda esperar al 5 de enero para saber algo más de estos planes anuales que celosamente guardan bajo llave. Esperamos poder aplacar la sed de conocimiento que muchos tenemos. Quizá nos quedamos un poco con las ganas -esperemos que no-, pero al menos tendremos a los Cultos Genestealer (y lo propio con los Gloomspite Gitz para los fans de Age of Sigmar) por fin anunciados:

*mera suposición basada en el transcurso de los hechos.
** y así se evita canibalizar las ventas.
Fuente
Miniwars