Tenga la forma que tenga, siempre hay una botellita de aguardiente para quitar el frío y curar algún que otro resfriado de ir por ahí de aventuras, todo el día a la intemperie de los Reinos Mortales, buscando aventuras y cazando algún conejo. Hay que llevar una petaca encima, que con el cuerpo destemplado si hay que salir pitando de algún troll que vagabundea por ahí luego uno se resfría y no se puede estar en cama para cuando venga la vendimia.
Lo bonito va a ser pintarla. Siempre quedan bien estas botellitas. Como las del mini bar de un hotel. Te bebes el vodka y lo rellenas con agua del grifo. ¡Ay, pataliebre!
Y con el whisky Ballantine's igual, que la botella es de color oscuro y no se nota. Una vez un taxista veterano en un bar de esos que abren hasta las tantas pidió un "Batallines". Lo juro y tengo testigos. Por Sigmar qué poeta guerrero. Si es que vivimos en los Reinos Mortales y no nos damos cuenta.
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